La intolerancia permanente al gluten que se presenta en individuos
genéticamente predispuestos. Se caracteriza por una reacción inflamatoria, de
base inmune, en la mucosa del instestino delgado. Ello dificulta la absorción
de los nutrientes de los alimentos.
Los síntomas más frecuentes: pérdida de apetito, fatiga, náuseas,
diarrea, vómitos, retraso del crecimiento, alteraciones del carácter
(irritabilidad, apatía, tristeza)... Los síntomas pueden estar ausentes. Pueden
aparecer también otros como raquitismo, fracturas espontáneas, osteoporosis,
alteraciones del esmalte dental, cefalea...
La
enfermedad celíaca puede presentarse a cualquier edad a lo largo de toda la vida.
El
tratamiento a seguir: Dieta estricta sin gluten durante toda la vida, basada en
alimentos naturales: legumbres, carnes, pescados, huevos, verduras... No es
fácil porque el trigoes el cerealmás utilizado en la elaboración de productos
envasados (el 70%de ellos lo contienen). El gluten se usa como excipiente de
aditivosyaromas, para preservar la humedad, para evitar la oxidación...
El
es una proteína presente en algunos cereales como trigo, cebada, centeno,
triticale (híbrido de trigo y centeno) y, posiblemente, avena.
Se
diagnostica con un examen clínico y una analítica de sangre se puede sospechar
de la enfermedad. Es imprescindible realizar una biopsia intestinal: extraer
una muestra de tejido del intestino delgado para ver si está o no dañado.
Pan, harina, pastas, bollos... Embutidos, quesos, frutos secos o conservas
pueden tener gluten, bien por una contaminación cruzada o por aditivos. Por
eso, los celíacos van a comprar con una lista de artículos.
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